The Habit es la encargada de dar inicio al disco, bajo un ligero halo de misterio y un bombo que va marcando la melodía, elemento que será una constante en los siguientes cortes del álbum. Y es así como sigue Further Away (Romance Police), la "In Sleep" del disco, la que representa el contenido de esta segunda producción, contando con arreglos electrónicos que en gran medida nos recuerda a su colaboración con el DJ Morgan Page en el tema The Longest Road. El tema que continúa mostrando agresividad y pausa, como aquellas canciones de los setentas, es Shameless, para dar paso a They All Want You, pieza lenta, también parte del repertorio acostumbrado de Lissie, efectiva y habitual en su discografía.
Sleepwalking es otra pieza clave del disco, con una progesión a los 15 segundos de iniciada que explotan al máximo el ritmo y la cadencia de una Lissie que se muestra en su plenitud, y es que la banda de apoyo es sin duda alguna, lo mejor que tiene para deslizar su voz en cada acorde. I Don't Wanna Go To Work es otra canción de esas que se inician con una calma que se sabe cortará en cualquier segundo, y es la progesión que lleva el bombo, la que indica el momento indicado para la incursión del bajo, que rodea todo, para nuevamente caer en el silencio y explotar repetidas veces en un espiral sonoro. Mountaintop Removal y la presencia del piano transforman en una noche apacible los pensamientos, y se mantiene de esa forma tras los 5 minutos y algunos segundos más que dura el tema. Love The City es también una pieza introspectiva, atmosférica, meditabunda. I Bet On You empieza a cambiar el caracter apacible de los últimos minutos, y es una guitarra oscura la que se desliza para dar forma a uno de los grandes momentos de este disco. Cold Fish es también una pieza interesante dentro del universo del Back To Forever, la misma fórmula aplicada a Can't Take It Back, siempre bajo la influencia de una batería que marca el ritmo en los momentos de quietud. Y finalmente Back to Forever, canción que lleva el nombre del disco y que cierra de manera genial una producción que supera con creces a su antecesora.
Sleepwalking es otra pieza clave del disco, con una progesión a los 15 segundos de iniciada que explotan al máximo el ritmo y la cadencia de una Lissie que se muestra en su plenitud, y es que la banda de apoyo es sin duda alguna, lo mejor que tiene para deslizar su voz en cada acorde. I Don't Wanna Go To Work es otra canción de esas que se inician con una calma que se sabe cortará en cualquier segundo, y es la progesión que lleva el bombo, la que indica el momento indicado para la incursión del bajo, que rodea todo, para nuevamente caer en el silencio y explotar repetidas veces en un espiral sonoro. Mountaintop Removal y la presencia del piano transforman en una noche apacible los pensamientos, y se mantiene de esa forma tras los 5 minutos y algunos segundos más que dura el tema. Love The City es también una pieza introspectiva, atmosférica, meditabunda. I Bet On You empieza a cambiar el caracter apacible de los últimos minutos, y es una guitarra oscura la que se desliza para dar forma a uno de los grandes momentos de este disco. Cold Fish es también una pieza interesante dentro del universo del Back To Forever, la misma fórmula aplicada a Can't Take It Back, siempre bajo la influencia de una batería que marca el ritmo en los momentos de quietud. Y finalmente Back to Forever, canción que lleva el nombre del disco y que cierra de manera genial una producción que supera con creces a su antecesora.